In extenso (PAN BOLIVIA) La Paz.– Las palomas en las plazas de la ciudad de La Paz, son un serio problema, porque destruyen los techos, hacen sus nidos en los techos de las viviendas antiguas del casco colonial, republicano y pos republicano que están alrededor de la plaza Murillo, recinto que nunca puede estar limpio, ya que estas aves hicieron de su hábitat, además la gente le entrega alimento durante el día y sus heces fecales provocan enfermedades entre las mismas personas.
Durante años las autoridades locales, han intentado controlar su reproducción, pero con pocos resultados, pues la sugerencia fueron desde envenenarlas hasta hacerlas corretear con halcones o águilas, enemigos naturales, pero no es posible tenerlos por el clima frígido de la ciudad.
PLAZA MURILLO
Las palomas han fijado su hábitat en el mismo centro del poder político y administrativo de Bolivia, la plaza Murillo, donde todos los días miles de palomas son el atractivo de niños, visitantes del interior y exterior del país, sin duda alguna, y el problema comienza cuando van a pernoctar y dejan la plaza lleno de heces de paloma, por lo general tienen que lavar todas la noches el centro de la misma, provocando un presupuesto aparte para la comunidad paceña.
Por las noches un sector duermes en las cornisas de los edificios como el Palacio de Gobierno, Legislativo, Gobernación, edificio París y otros, que son los lugares perfectos para pernoctar de las palomas y claro las heces fecales van por doquier a las fachadas de los edificios.
Esta una parte del problema, pues las palomas se aparean y reproducen de manera increíble, lo que implica buscar lugares en los techos de la casas para armar sus nidos y empollar sus huevos, raro que sea en árboles de los pocos que hay por el sector.
El maíz que entregan como alimentos las personas que adquieren sus bolsitas para darles a las palomas, son lo que generalmente aseguran su estadía en el sector, ya que las palomas no se alejan del alimento como cualquier otro animal seguramente.
VENDEDORES DE MAÍZ
Entonces son los puestitos que comercializan el maíz en la plaza Murillo, quienes fomentan la estadía de las aves. En su momento se intentó prohibir la ubicación y venta de los puestos, pero se hizo un escándalo y el tema siguió e incluso se hizo estudios que las heces fecales en tiempo de calor se levanta como pólvora en el día y era contraproducente con la venta de gelatinas, chantillí, helados, ya el mismo se adhiere a los productos cuando la consumen y claro la gente toma asiento y sol sin darse cuenta que están impregnados los productos con heces fecales de las palomas.
Se utilizaron varias formas de despejar a las palomas de la plaza Murillo, sin embargo vanos fueron los esfuerzo de las autoridades locales, al final llegaron a la conclusión de hacer una casas en la misma área para controlar su reproducción para ello la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis del municipio paceño recolecta cada tiempo los huevos de paloma de la plaza Murillo a fin de evaluar la efectividad del anticonceptivo “Ovocontrol”, aplicado desde enero a fin de evitar la proliferación de estas aves.
Después de la recogida de huevos pasa a una unidad para analizar, si hay o no embriones, pues en las últimos controles disminuyó de manera considerable.
El producto Ovocontrol, tiene forma de pellets (grageas) y se fabrica con hormonas que controlan la ovulación de las palomas, en plazas y escuelas a fin de evitar el incremento de las palomas.
El anticonceptivo para palomas Ovocontrol, implementado a estas aves por la Alcaldía, funciona adecuadamente, según refleja una primera evaluación efectuada por técnicos de la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis a huevos de la plaza Murillo. Entre 400 a 600 palomas son las que se reproducen y la intención es mantener ese número y evitar que crezca.
OTROS LUGARES
Pero el tema no solo es en la plaza Murillo, por el contrario el recojo de huevos de las aves también son en las iglesias de San Francisco y San Agustín a fin de realizar similar evaluación.
Los huevos recolectados, define incrementar el anticonceptivo o buscar otro producto para reducir la población de las aves, por los daños que provocan en la ciudad.
Además la actividad es constante a requerimiento de la población y precautelar la salud pública de la ciudadanía. Una paloma puede tener 200 huevos al año, siendo muy alto en su reproducción. (bs/ad) FOTOS: DC.