IN EXTENSO.- Los técnicos de los clubes deben afrontar tres tipos de presiones constantes, el estres «mortal», presión de los dirigentes, luego de los hinchas que no entienden de una derrota y en consecuencia atinan a pedir «volarlo» al entrenador, especialmente cuando las derrotas se vienen encima y claro es responsabilidad de los futbolistas como del cuerpo técnico.
Una derrota, no es explicable desde ningún punto de vista para los hinchas y dirigentes, es lo peor que le puede suceder, ya que para los hinchas las derrotas es un «desastre» para los dirigentes una pérdida del premio económicó a nivel internacional, que por o general apuestan a ese objetivo y es la razón que dicen, gran parte de los 16 clubes pretenden estar ubicados entre los 8 para ser premiados, aunque no es el caso de Bolívar que ya clasificó a la Copa Libertadores de América y encima tiene bien ganado los tres millones de dólares.
Por lo general son los directores técnicos los renunciados de los clubes y los mismos giran y giran en un círculo vicioso, ya que los mismos se repiten en los clubes, es como que, el fútbol no progresa o si quiere no avanza.
Es más de los mismo y muchos de los entrenadores ni siquiera asumen un curso de actualización a nivel internacional y actúan sobre lo que ven en los cotejos internacionales, sin ninguna base de catedráticos del fútbol.
Existe un círculo de técnicos «Tigo» charlatanes que da la impresión de que no dejan que ingresen otros entrenadores o es que los clubes tiene algún pacto para no contratar de otros directores, ya que a Bolivia y los clubes le esta haciendo falta una renovación de entrenadores, seguimos con el fútbol lento y de viejos y con sistemas de juego de hace más 30 años atrás, excepto algunos clubes que cambiaron y ahora están punteros en la tabla de posiciones del torneo de veteranos extranjeros que no promociona jugadores jóvenes bolivianos.
El torno de fútbol actual esta en una franja donde se decide quienes van entre los ocho premios y los relegados jugar y evitar llegar a los dos últimos lugares del descenso.
POR SI ACASO
Resulta que antes de ingresar a la décima fecha, cinco clubes de la División Profesional «volaron» a sus entrenadores de sus clubes supuestamente para mejorar su resultados, al menos esa es la intención ya que los resultados en el Torneo Clausura con fueron favorables, cuyo premio principal al campeón es la clasificación como Bolivia II a la Copa Libertadores 2023, con un premio de nada menos 3 millones dólares y en la Sudamericana 1 millón.
El chileno Rodrigo Venegas fue enterado por renunciado del fútbol boliviano. La otra versión es que el entrenador renunció de forma irrevocable a la conducción de Blooming, tras la derrota (2-1) sufrida ante Palmaflor, en Cochabamba.
Los entrenadores retirados hasta la fecha, empezó con el argentino Cristian Díaz en The Strongest. Fue reemplazado por Claudio Biaggio.
Le siguió Luis García de Royal Pari, dejando la posta en manos de Víctor Hugo Andrada.
Universitario de Sucre, comprometido con la zona del descenso de categoría, sacó al argentino Adrián Romero para dejar la conducción del equipo bajo las órdenes del chileno Sebastián Núñez.
En Wilstermann acordó la rescisión de contrato con Álvaro Peña, después dirigió un partido Alex Da Silva y ahora está Alberto Illanes. Como se puede observar los técnicos rotan de un club a otro, lo que explica que el fútbol esta estancado, ya que son los mismos que dirigen a los equipos.
Esta dicho que si bien se renovará la selección, al menos esa es la intención de la FBF, también los clubes deben pensar en asumir otras direcciones cuando se trata de contratar técnicos.
Hay que aclarar una derrota es parte del cualquier especialidad en el deporte, no es delito, por cuanto los hinchas deben saber que perder también están en las reglas de juego, por supuesto que a nadie le gusta perder,pero esa posibilidad siempre existirá.
(panbolivia.net/WordPress) 12/8/22, La Paz.
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