In Extenso (PAN BOLIVIA) La Paz.- Las calles de la ciudad de La Paz se han convertido en tráfico imposible para vehículos y peatones, bien por la excesiva cantidad de vehículos del transporte público o las constantes manifestaciones de marchas que eclosionan el centro de la ciudad y la gente virtualmente prefiere caminar.
Miles de vehículos como minibuses y radiotaxis se incrementan cada día en las distintas líneas de transporte de manera indiscriminada y sin control alguno y si la hay entonces es asabiendas de las autoridades. Contrariamente los choferes tampoco permiten que la regulación llegue a su sector y hace poco los choferes pidieron que el municipio designe nuevas rutas a los barrios, cuando en realidad ya no existen calles por donde puedan circular.
Aun peor situación será cuando inauguren la nueva autopista con seis carriles, diseño que fue mal planificado, ya que si bien se aumentan carriles de subida y de bajada, sin embargo los vehículos llegarán al mismo embudo tanto en la Avenida Montes como en la Ceja ya que al final o comienzo como quiere entenderlo se cierra como un embudo, debido a que esos sectores no se ampliaron y tampoco se lo hará, así que ya se puede anunciar la tremenda trancadera que provocará la nueva autopista.
La ciudad como otras tiene sus limitaciones, una de ellas es que La Paz, tiene muy pocas calles por las pendientes que prohíben ampliar más calles y en todo caso los ciudadanos deben conformarse con algunas avenidas y con suerte algo ancha.
SON UNA PESADILLA
Los choferes no tienen la menor intención de disminuir el parque automotor que ya pasan las 250 mil unidades y circulan por las pocas calles que une entre norte y sur, que son tres vías, la avenida Los Leones, Kantutani y la carretera vieja (baja por la 20 de Octubre-San Jorge) que va por la casa presidencial para el colmo y abuso cierran esta calle todas las noches a cierta hora, perjudicando al tráfico.
En el centro de la ciudad es un verdadero chiperío de líneas de minibuses y radiotaxis y taxis cuando existen marchas, pues tan solo cerrar una calle, eclosiona el tráfico y virtualmente se paraliza el movimiento y los ciudadanos prefieren dejar los minibuses y caminar de prisa para no poder el tiempo, pero los choferes no se inmutan del hecho.
Contrariamente los días que no hay marchas o manifestaciones, el tema no mejora tampoco, ya que en una cuadra de tráfico encuentra que el 90 por ciento son minibuses, el otro tanto entre taxis radiotaxis buses, la constante se repite, muy pocos autos particulares. Entre ellos provocan las “trancaderas”, porque estacionan donde quieren, esperan a llenar sus vehículos sin importarles la necesidad de los pasajeros, el chiste en recaudar y en ese afán se perjudican.
MÁS MINIBUSES
A eso sume que los sindicatos siguen incorporando minibuses a sus líneas al igual que los radiotaxis y taxis…llegado el momento las calles de la ciudad se convierte en un parqueo, siendo un atolladero de autos, generado por los mismos choferes públicos, además provocando que los paceños sigan su vida evitando tomar el servicio de transporte público, ya que son una pérdida de tiempo y no una solución, solamente utilizan el servicio para distancias largas.
Siga sumando, la contaminación está a la orden del día, ya que hasta la fecha el municipio no lograr sacar de circulación a micros y buses de los años ´70 que siguen en circulación en la urbe paceña,
COMERCIANTES AMBULANTES
Y siga sumando…porque desde hace pocos años atrás los comerciantes ambulante y fijos crecieron de manera ostensible y cuando se intenta denunciar nadie sabe nada en el municipio”, pues aparecen como arte de magia los ambulantes y fijos.
En una sola calle en el centro de la ciudad usted puede encontrar más de 20 kioscos, tome en cuenta que en La Paz las calles son cortas.
PARQUEO GRATUITO
Ni piense en parqueo gratuito, esto ya es una quimera, pues existen pocos espacios o contados por no decir otra cosa, y por lo general lo hacen en algunas calles de ocultas o que los vecinos se molesten con el riesgo de que le roben.
HACEN LO QUE QUIEREN
Los choferes que trabajan con el gobierno, se apoderaron de esta ciudad y al final hacen lo que les da la gana, siguen los trameajes, paran donde quieren, no les interesa la comodidad de los pasajeros, cobran lo que quieren en especial radiotaxis y taxis, van hasta donde quieren y en medio de la poca higiene que tienen los choferes del transporte público.
PARQUEOS
Hablando de parqueos, pues es el gran negocio, ya que los pocos que realizan ese servicio, siempre están ocupado de día y noche e incluso el municipio ingreso en el negocio y ahora piensa construir edificios de parqueos en algunos casos en concesión a privados y otros manejados por ellos.
Ejemplo es la construcción de un edificio de parqueos en la avenida Simón Bolívar y Juan de la Riva, zona Santa Bárbara, que supuestamente estiman que atenderá un 50% de la demanda de estacionamientos en el centro paceño.
La Comuna hace poco, firmó un contrato de concesión con una empresa privada para la construcción del edificio en un año y medio, en qué condiciones nos sabemos y menos los ciudadanos que habitan en la ciudad maravillosa.
El criterio es reducir al menos en un 50% pues la demanda que se genera no es satisfecha en el Casco Urbano Central. Eso significa que son los oficinistas, empresa pública y muy poca privada necesitan parqueos.
Existe una demanda de parqueo por aproximadamente 700 y 800 motorizados, pese a que hay una decena de recintos privados que no logran cubrir la necesidad. Hay que tomar en cuenta que son parqueos por horas o circunstanciales.
El proyecto contempla la implementación de 330 parqueos para vehículos livianos, 10 para pesados y 35 para motocicletas.
La empresa privada realizará una inversión de aproximadamente 25 millones de bolivianos para construir el edificio, una plaza y una pasarela que vinculará el lugar con la Estación de Transferencia del Pumakatari (Parque Urbano Central), sin embargo, no es la solución para evitar las trancaderas que genera el transporte público haya marchas o no.
La solución es limitar más números de placas y dejar de dar placas a nuevas minibuses, taxis, radiotaxis y sacar los viejos vehículos de circulación y no dar autorizaciones a comerciantes fijos y ambulantes. (kd/js)