In Extenso (PAN BOLIVIA) La Paz.- La Caja Nacional de Seguro (CNS) de Bolivia, se ha convertido en el sistema más inseguro de atención a los pacientes o enfermos, llámele como quiera, pero lo cierto es que ir de consulta al médico de la Caja, es todo un drama, por no decir una odisea y no es por la mala atención como aducen algunos políticos de mala fe, sino porque ya eclosionó la capacidad de atención, en tiempo, espacio, personal, medicamentos y para el colmo contamos con la dirección más mediocre que nos resuelve las necesidades de los asegurados.
Además existen pocos médicos contratados por la CNS en las distintas especialidades, interinos son contrato como en el servicio público, tan solo trabajan un turno a eso, sume que por lo general no hay medicamentos y se los tiene que comprar y quizás le devuelvan el dinero y para ello es una eternidad y termina olvidándose.
En la Caja es todo un trámite para que le atiendan, pero no es un tema de los médicos, ni que permiso para ingresar al palacio de la plaza Murillo.
ECLOSIONAN
Casi las cinco de la mañana la gente comienza a moverse en las puertas de las clínicas de las Caja Nacional de Seguro, como también el Hospital General de la zona de Miraflores, donde el que más y menos asiste bien por emergencias o consultas, antes era muy accesible, sin embargo, actualmente se cobra hasta de lo que respiras, incluido emergencias.
La mayoría de las especialidades médicas y durante todos los días están eclosionados por pacientes y un buen sector se queda sin la atención y busca otras alternativas o se aguanta y sigue su destino hasta enfermarse de mayor gravedad.
Ya que hemos empezado por el Hospital General, es el centro donde el que más o menos llegó por alguna razón, pero de igual manera tiene que hacer fila desde la madrugada para hacerse de una ficha y ser atendido y puede advertir que con gran esperanza llegan a las puertas los pacientes o quizás sea mejor decir impacientes, y los pacientes deberían serlo los médicos, ya que ni ellos pueden solucionar un problema administrativo, pues la carencia de políticas de Estado, provocan una serie de desajustes en la atención final del paciente que de un buen tiempo a esta parte es el impaciente, porque se ha convertido e intolerante a la hora de asistir a un centro médico, primero que demanda un bue tiempo, segundo que no le dan permiso en su trabajo, pero eso es una parte del problema, pues si asiste al centro médico de la CNS, esta clavado porque chocará con; primero el tema de la ficha y para ello debe de madrugar, segundo si es que alcanza al cupo de atención del horario del médico destinado y si no vuélvase mañana con enfermedad o termina comprándose Ibuprofeno en las grandes cadenas de farmacias que le venden no más, con o sin receta…nadie controla…así de libre son nuestros males.
“NI SE LE OCURRA OPERARSE”
Esta “tronado” si le dicen que debe operarse, ya que ellos deciden hasta cuando tiene que aguantarse del mal, es algo así como que juegan con su vida o lo expone al azar. Pero insisto no es un tema de los médicos y ramas anexas, es administrativo y de altos ejecutivos de la Caja y del gobierno en el caso del sistema público, ya que da la impresión que no desean resolver el tema, pues se necesita más quirófanos, más médicos y otro personal, más hospitales, más consultorios…algunos creo que no entienden.
Veamos, le programan una operación dependiendo de los espacios en quirófano y con suerte podría ser dentro de pocos días, por lo general de semana y meses y no es broma, y normalmente eso ocurre en la Caja o en el Hospital General, ojo que esto no es problema sólo de La Paz, también lo es en el Viedma de Cochabamba y otros, en Santa Cruz en el Percy Boland, en Oruro y otras ciudades, ni que decir en el campo.
Las enfermeras hacen lo que tienen que hacer, programan las operaciones de acuerdo a una lista y que en muchos casos son semanas o meses después entretanto “tómese estito”, eso quiere decir que se aguante de su enfermedad y punto, termina yendo a un consultorio médico particular, donde la “fajarán” hasta el último centavo “sale curado, pero pobre económicamente”, porque tampoco existe control en los cobros, ni se le ocurra mencionar al Ministerio de Salud, es un saludo a la bandera.
En otras palabras, el seguro que tiene en la Caja Nacional de Salud es inseguro, primero porque no contratan los suficientes médicos y otro personal, medicamentos limitados, tiempos de atención limitados cuando deberían ser las 24 horas, pocos especialistas y claro la gente anda alterada con las enfermeras, médicos hasta con los policías y seguramente muy probable justificados.
Pero aquí el tema no es problema de los “impacientes” (pacientes) o médicos, enfermeras, sino de los que administran la CNS, son los ejecutivos y desde que el gobierno (mete la mano) nomina arbitrariamente a la cabeza un carpintero para que atienda nuestra salud hasta que no se toman decisiones ejecutivas, ya que no es gente competente y seguimos de los siglos por los siglos con el problema de salud…insisto no es tema de los médicos como el gobierno desea hacer ver.
Para poner un ejemplo es algo así como las AFPs, es dinero de los trabajadores y jubilados y se tiene millones de dólares a cada segundo y no manejan, menos deciden sobre esos recursos y son los políticos de turno que tiene la potestad de disponer de ese dinero, ya que ellos colocan al director, llámele gerente u otros títulos o algo mejor colocan un minero al frente de la CNS…que tal.
HAY DINERO
En CNS ingresa dinero a cada segundo y no es broma, hay tanto dinero que usted no se imagina, ya que son miles los que aportan, pero las soluciones nunca llegan y siguen sobre lo mismo.
Esta es una de las razones para que haya hacinamiento en las atenciones, operaciones, recojo de medicamentos y otros servicios. Ah! Pero hay algo más que usted debe considerar antes ira a una consulta médica o siquiera se le ocurre enfermarse, al margen de que el gobierno constantemente desprestigia a médicos y ramas anexas, pues desde hace pocos años el gobierno abrió el sistema de la CNS para los viejitos, embarazadas, con discapacidad, niños que son atendidos de manera “gratuita” en todos los centros y son los que más acuden que los propios asegurados, y esto ha provocado una sobresaturación en la atención, a lo que ya estaba eclosionado.
“CONTROL DE HACINAMIENTO”
Como para no creer, pero leí en la Patria de Oruro los siguiente “La Red Urbana de Salud (RUS), del Servicio Departamental de Salud (Sedes) Oruro, capacita al personal de los centros de salud de la ciudad, con el fin de disminuir el hacinamiento, optimizando la atención y orientación a los enfermos, para que acudan a nosocomios según el grado de enfermedad que tengan”… cómo sabemos qué grado de enfermedad tenemos, obligadamente se tienen que ir a un médico para que lo valoren…
¿A alguien le interesará la salud pública de los bolivianos? Y no es cuestión de los profesionales médicos es un tema de buenas políticas de Estado y no buscar enfrentamientos con los galenos y ramas anexas o desprestigiarlos, amenazarlos, cuando en realidad se intenta tapar la mediocridad en la cual se manejan las autoridades de salud desde la cabeza de la CNS hasta las mismas atenciones de la salud pública…es urgente, necesitamos visionarios en salud pública, entonces termina uno preguntándose ¿habrá algún genio o varios en el país para resolver este problema? creo que si hay, pero no los dejan surgir. (kd/bs)