#bolivia #lapazmaravillosa #heces #plazas #mecuidastecuido
- Objetos encontrados en Lago Titicaca, revelan que efectivamente la cultura tiwanacota, tenía una religión establecida.
INEXTENSO (panbolivia) agosto de 2021, La Paz.- Me llamó la atención de un artículo sobre las cultura Tiwanacota, cuando justo estaba preparando otro del investigador Eduardo Pareja que también se sumergió en el Lago, pero en un tiempo anterior y resulta que otros países conocen más de nuestros antepasados que los mismos bolivianos, ya que estos estudios se realizan con extranjeros y esas investigaciones se conocen mediante publicaciones de agencias internacionales y somos últimos en enterarnos.
Suponemos que quienes investigan, dejaron una copia y que no es seguramente difundida debido a negligencia de las autoridades de los gobiernos de turno, prefiero pensar de esta manera, que deducir otra situación.
Son varios los estudios que se realizaron en diferentes años y lugares del país, encontrando objetos de oro, cerámica, tallados, tejidos, chullpares vasijas, y otros objetos que no sabemos si existe un control por parte de las autoridades de los distintos gobiernos que fuera de cuidar los bienes del país se dedican a la política partidista.
Más de 25 años escribiendo sobre las culturas de nuestro país, hemos podido ver que en varias investigaciones, los encargados se llevaron algunos objetos y claro, otros actuaron de manera honesta, lamentablemente Bolivia no cuenta con financiamiento para hacer investigaciones como estado y debe recurrir o aceptar las investigaciones de fundaciones, Ongs, investigadores que efectivamente ponen su dinero e invierten a cambio de una filantropía falsa, ya que de alguna manera recuperan su inversión, con piezas antiguas que no son mostradas y extraídas y sacadas al exterior.
Algo similar ocurre con el folklore boliviano que es pirateado por peruanos y chilenos al decir que la Morenada, los Caporales, Diablada y otras danzas bolivianas y creadas por gente de nuestra región se adueñan e incluso no tienen la vergüenza de hacer nombrar como propias de su región y claro ya vieron el negocio que genera, por eso existe copias de las entradas como en Gran Poder, Prestes, carnaval de Oruro y las más de 365 entradas que se realizan en La Paz, solamente, sin tomar en cuenta en el interior del país.
Esto ocurre, porque las autoridades que son nominadas de manera improvisada y políticamente perjudican a nuestras culturas como en danzas, música, turismo, investigaciones antropológicas y otros.
Quizás no sea el caso de esta publicación, pero puedo afirmar que muy pocos bolivianos conocen de esta investigación reflejada en un artículo por Alejandra Martins en la BBC News Mundo el 2 abril de 2019 que hoy la hacemos conocer en pan Bolivia.
El Lago Titicaca albergó sofisticadas ceremonias religiosas 500 años antes de la llegada de la cultura Inca, según este estudio, por supuesto revelador, ya que además confirma algunos otros documentos que aseveran que los Incas en su formación fueron tiwanacotas.
Un conjunto de extraordinarios artefactos y restos hallados cerca de la Isla del Sol, en el lado boliviano del lago Titicaca, indican que la religión organizada surgió en la región mucho antes de lo que se pensaba.
«La gente suele asociar la Isla del Sol con los Incas, porque fue un sitio importante de peregrinaje para ellos y dejaron allí edificios ceremoniales y ofrendas», señaló el arqueólogo boliviano José Capriles, profesor de antropología de la Universidad Estatal de Pensilvania en Estados Unidos.
Capriles es uno de los autores del estudio que acaba de ser publicado en la revista de la Academia de Ciencias de Estados Unidos, PNAS por sus siglas en inglés.
Los incas llegaron a esa región solo cerca del siglo XV, señaló el arqueólogo.
«Nuestra investigación muestra que los pobladores del estado de Tiwanaku, que se desarrolló en el Lago Titicaca entre los años 500 y 1.100 A de C, fueron los primeros en realizar ofrendas de valor a deidades religiosas».
El asombroso tesoro sumergido en el lago Titicaca que será parte de un gran museo submarino en Bolivia y que hasta el momento no se concreta por parte del gobierno y menos del ministerio de Cultura que peca de ser eficiente, debido a la pobre preparación de la actual titular, lamentablemente.
ARRECIFE ESTRATÉGICO
Según esta nota, el equipo científico fue liderado por Christophe Delaere, investigador del Centro de Arqueología Marítima de la Universidad de Oxford y de la Universidad Libre de Bruselas, y autor principal del estudio.
Los arqueólogos usaron sonares y equipos submarinos de fotogrametría para escanear el sitio del hallazgo, el arrecife de Khoa, en las cercanías de la orilla noroeste de la Isla del Sol, a una profundidad superior a cinco metros.
Este dato demuestra que varias culturas que vivían alrededor de las aguas terminaron votando sus objetos valiosos en las profundidades del Lago Titicaca, como una forma de ocultar sus bienes o cuidar los objetos valiosos como oro, tallados, imágenes, monolitos, aunque otra teoría es que un movimiento de tierra “terremoto” sepultó y dio cuenta de esta cultura milenaria, una de las más antiguas de América.
«El arrecife (isla) de Khoa se localiza en un lugar estratégico, casi en el mismo centro geográfico del lago, y por tanto fue estratégico en términos de consolidar el control geopolítico de la región en su conjunto, algo que solamente Tiwanaku pudo hacer», explicó Capriles a BBC Mundo. Aunque no identifica que el Lago Menor de Bolivia conocido entre los investigadores y arqueólogos fue el sector religioso de varias culturas de deidades y su adoración.
«Antes del surgimiento de Tiwanaku, la orilla del lago estaba ocupada por comunidades articuladas en jefaturas y cacicazgos de influencia muy limitada».
Para Capriles, el descubrimiento es valioso no solamente por la multiplicidad de ofrendas excepcionalmente bien preservadas. «Este hallazgo es extraordinario porque estas piezas estaban todas asociadas y en contexto, lo cual nos permite acceder al comportamiento ritual de la sociedad que produjo estas ofrendas y su importancia ceremonial», señaló el arqueólogo boliviano.
INCENSARIOS EN FORMA DE PUMA
La mayor parte de los hallazgos corresponden al período de expansión y consolidación del estado de Tiwanaku.
Según dice la investigación, entre las ofrendas había un gran número de piezas de oro, incensarios de cerámica con forma de puma, un animal sagrado, así como miniaturas de conchas y lapidaria (piedras preciosas), señaló.
Agrega que «Destacan un medallón de oro con la representación iconográfica del personaje central con apéndices que irradian de su rostro, sugiriendo que podría estar vinculado al sol».
Entre las ofrendas había un gran número de piezas de oro, además de incensarios de cerámica con forma de puma, un animal sagrado.
«También hay conchas y figurinas hechas en Spondylus, una valva que actualmente solamente habita en las aguas cálidas del Océano Pacífico de Ecuador hacia el norte, es decir, a varios centenares de kilómetros del lago Titicaca», explicó el investigador.
El hallazgo también incluye restos óseos de varias llamas principalmente juveniles que fueron probablemente sacrificadas como parte de los rituales.
Para Delaere, el hallazgo deja en evidencia «una de las ventajas de los legados subacuáticos».
«El Lago Titicaca protege los materiales de sus culturas antiguas del tiempo y de la interferencia del hombre. Nunca se habían descubierto antes tantos artefactos de esta calidad».
ÉLITES Y CLÉRIGOS
«Todos estos objetos en contexto nos permiten entender que las élites y clérigos de Tiwanaku practicaban rituales costosos, de consumo conspicuo y privados (el arrecife era de muy difícil acceso) como parte del proceso de formalización de la religión como institución social», señaló.
Las élites y clérigos de Tiwanaku practicaban rituales costosos, de consumo conspicuo y privados (el arrecife era de muy difícil acceso), según el arqueólogo boliviano José Capriles.
El hallazgo permite vislumbrar «que las élites de Tiwanaku estaban realizando ofrendas costosas en el centro del lago posiblemente vinculadas a la sacralización de la Isla del Sol como lugar objeto de peregrinaje.»
Charles Stanish, antropólogo de la Universidad del Sur de Florida y otro de los autores del estudio, señaló que las procesiones rituales eran parte del aparato del Estado y de sus mecanismos para lograr la cooperación de sus ciudadanos.
«El ritual y la religión tenían una profunda importancia en los estados antiguos. Estructuraban la vida de la gente, la economía, toda la sociedad».
SEQUÍAS
Varios estudios sugieren que el colapso de Tiwanaku se debió al deterioro de las condiciones climáticas y ambientales que generaron pérdidas en el sistema de producción agrícola, explicó Capriles.
ISLA DEL SOL EN EL LAGO TITICACA
Isla del Sol en el Lago Titicaca. En las cercanías se encuentra el arrecife de Khoa, en un lugar estratégico casi en el mismo centro geográfico del lago.
«Es probable que las instituciones políticas y religiosas que involucraron rituales como aquellos realizados en Khoa no hayan podido impedir una mayor frecuencia de sequías y por tanto, perdieron legitimidad sobre una base cada vez más afectada por el riesgo ambiental».
Para Capriles, «el proyecto de arqueología subacuática en el Lago Titicaca que exitosamente dirigió el Dr. Christophe Delaere está permitiendo ampliar significativamente nuestra comprensión acerca de las sociedades precolombinas que se desarrollaron en la cuenca del Lago Titicaca, al explorar los vestigios que dejaron estas sociedades y que actualmente están por debajo del agua». (rc/md/bbc-f:bbc))
