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D´bolea (panbolivia.com) marzo 30 de 2021, La Paz .- Durante 27 años el seleccionado nacional no tiene estabilidad de juego y menos de entrenadores y una pobre promoción de nuevos jugadores de los clubes que se han convertido en la mutual de futbolistas “acabados” del extranjero y que son fomentados por los mismos dirigentes bolivianos para seguir ampliando su participación en el torneo profesional de la primera división del fútbol boliviano.
Esta situación queda confirmada por las últimas dos derrotas que le propinaron en partidos amistosos, que ni siquiera puede vencer en este tipo de partidos, algo peor sucede en los oficiales, prueba de ello es que el equipo nacional se encuentra en la “cola” de la tabla de posiciones con tan solo un punto tras jugarse cuatro partidos y que como van las cosas, virtualmente sus posibilidades de clasificar al mundial de Catar 2022 es cero.
El primero ante Chile de visitante por 2-1 y el segundo el de ayer ante Ecuador por 1-2, resultados que reflejan la “pobreza” en la cual se desenvuelve del fútbol de los clubes privados de la primera división que hasta la fecha y después de haber asistido al Mundial de Estados Unidos de 1993, el proceso de cambio fue un fracaso indudable, pues desde ese año fueron de mal en peor si tomamos como parámetro ese evento, porque es la máxima exposición del fútbol internacional, similar situación ocurre en la Copa Sudamericana y la Copa Libertadores de América.
“Técnicos” se contrataron para la instancia del seleccionado que vinieron y se fueron sin lograr nada, mostrando la mediocridad en sus conocimientos y “pacpacos” en sus proyectos mal utilizando el término “proceso” que fuera de ser el mismo, han demostrado no mejorar el rendimiento de los futbolistas de los clubes que son convocados e incluso se recurre a nacionalizados, que en cierta forma no es malo, pero tendrían que ser contratados jugadores de primer nivel y no de un rendimiento convincente y doméstico.
Mientras los futbolistas de clubes siguen rondando en la regularidad, sin poder superar la excelencia en el juego y este el otro tanto que no se supera, ya que los jugadores se quedan en el hecho en el “triste” hecho de comentarios de los periodistas deportivos que son “buenos”, menos le ponen el esmero necesario como para superar su rendimiento tanto físico y técnicos que ambos casos es cuestionable.
La otra parte es que para promocionar nuevos jugadores en los clubes se han convertido en el “Talón de Aquiles”, porque como gran cosa hacen jugar a los jóvenes minutos y mejor si no los alinean en algún encuentro, debido a que los mismos técnicos entre nacionales y extranjeros no dan oportunidad a los jóvenes, cuando en esta época existen clubes en el mundo que ya incorporan en sus selecciones a jugadores desde sus 16 años y no es que no haya jugadores, si hay, pero no dejan surgir los dirigentes que al parecer tienen un buen negocio con la mutual de futbolistas del extranjero que contratan.
Hace 27 años atrás que el seleccionado “privado” de fútbol de los clubes ya no representa a Bolivia, sino a un sector de equipos que pecan de ser profesionales y que sin duda para los dirigentes debe estar muy bien, aunque para los seguidores del futbol es una frustración ver a los clubes y seleccionado en partidos internacionales como un relleno en los torneos internacionales.
El fútbol nacional “privado” anda a las patadas y seguimos sin superar el nivel que en su momento pusieron los verdaderos futbolistas en ese mundial (EEUU-1994) tan recordado, pero que incluso queda tan lejano que muy pocos recuerdan.
No es mera casualidad las derrotas en los amistosos con miras a disputar la Copa América a jugarse en Argentina y Colombia, pero tampoco convencen en partidos oficiales.
Los futbolistas, entrenadores, dirigentes como gran cosa brindan pequeños tiempos mal llamados “microciclos” de entrenamiento que en la realidad es una pérdida de tiempo, ya que los convocados para jugar en el seleccionado no tienen ni pies y menos cabeza, lo mismo sucede con los entrenadores improvisados que hasta el momento pasaron por el seleccionado.
Esta dicho que los nuestros necesitan más tiempo para coordinar su juego y no es el caso como de otras selecciones de alto nivel que si pueden hacer eso, juntarlos y entrenar muy poco, manteniendo su rendimiento.
Sea como fuese este año tampoco será de la selección y menos de los clubes, ojalá nos equivoquemos, pero el andamiaje de los clubes y seleccionado sigue en lo mismo y los dirigentes y técnicos siguen vendiéndonos “charque” y está claro que no desean mejorar el fútbol y tal cual, está bien para los dirigentes, entrenadores, jugadores y entre los seguidores pierde vigencia esta disciplina deportiva al margen de otras consideraciones que seguramente tendrá el lector o el futbolero. (D´bolea)
