IN EXTENSO.- Una jornada de violencia atraviesa del departamento de Santa Cruz, con choques callejeros, represión policial y las oficinas de un sindicato campesino quemado y saqueado, entre otros incidentes e incluso la Central Obrera regional fue asaltada por delincuentes que aprovecharon el caos entre los ciudadanos.
La violencia se apodera de Bolivia y crece, debido a que hasta el momento el gobierno de Luis Arce del MAS, no soluciona los conflictos y se hace burla de los bolivianos al no autorizar el censo-2023 y pretende imponer la realización un año después.
La provocación ocurrió durante la mañana, cuando vendedores al menudeo y choferes del servicio público marcharon desde el Parque Urbano, donde encabezaron grupos de choque del MAS, ya que el primero de vendedores fueron mirones y exigieron que se suspendan los bloqueos de los cívicos, ayudados por un grupo de encapuchados (MAS) que provocó agresiones en puntos de bloqueo.
Los ciudadanos aguantaron la «paliza», y por la tarde grupos de ciudadanos comenzaron a incendiar la Federación de Campesinos de Santa Cruz, incendiando sus instalaciones.
Los vecinos se organizaron e hicieron retroceder a los manifestantes oficialistas, pese a que estos contaban con el apoyo de la Policía que empezó a darles protección. También amedrentaron al Instituto Nacional de Estadísticas de la ciudad cruceña.
La policía antimotines intervino lanzando gases lacrimógenos incluso a civiles que no tenían nada que ver con la protesta.
“El pueblo cruceño ha sido arremetido por la Policía y por el Movimiento Al Socialismo”, dijo a la prensa el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho. “Han generado zozobra y han disparado gases lacrimógenos”.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, respondió que la manifestación de vendedores y choferes “era la marcha pacífica del pueblo que fue atacada brutalmente por sectores radicales financiados que buscan el enfrentamiento”. Cuando en la realidad fueron los cabecillas de esa marcha que atacaron a civiles en los puntos de bloqueo de los cívicos y la marcha no tenpia nada de pacifíco.
LA ARREMETIDA
Lo que sucedió por la mañana, grupos afines al Movimiento Al Socialismo (MAS), con los rostros cubiertos y palos en mano, encabezaron la marcha de los gremiales y levantan de manera violenta los puntos de bloqueo instalados en el primer y segundo anillo de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra por vecinos que demandan el Censo 2023. La movilización exige que se levante el paro indefinido que cumple 21 días este viernes, 11 de noviembre.
Este grupo de personas durante su trayecto se enfrentaron con vecinos del 1er., y 2do. Anillo, quienes rechazaron la forma violenta que ejercían al desbloquear las vías. Retiraron las llantas y rompieron banderas y sogas que se encontraban en las avenidas. Además, agredieron físicamente a un grupo de periodistas que realizaban la cobertura en el lugar.
EN LA CENTRAL OBRERA
Otro grupo de ciudadanos en el centro de la capital cruceña, específicamente en puertas de la Central Obrera Departamental (COD), en la calle Republiquetas intentaron tomar las oficinas de los trabajadores pro MAS.
La policía desplegó a un contingente para resguardar el lugar y procedió a gasificar a los manifestantes que rechazan los hechos de violencia registrados en horas de la mañana en el primer y segundo anillo.
(panbolivia.net/WordPress) 12/11/22, Santa Cruz.
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