IN EXTENSO.- Los clubes que fueron dirigidos por políticos por lo general fracasan y descienden de categoría en el fútbol boliviano, es el caso de Palma Flor encabezado por el fraude y pedófilo del cocalero y las 6 federaciones Evo Morales, anteriormente corrió la misma suerte Sport Boys de Warnes con el ex ministro Carlos Romero, operador de político del MAS.
Los clubes son muy vulnerables y asociados a ciertos actores políticos para lavar su imagen, y ocultar sus fechorías, pues intentan tapar por lo general sus relaciones ilegales en la sociedad. Eso que ocurrió con Palma Flor que por un buen momento el club fue transferido a los cocaleros que están relacionados con la cocaína, ya que so los productores de coca para la fabricación de la droga en el Chapare.
El dirigente cocalero, identificado como “dictador”, fraude y pedófilo logro llevar al club de la ciudad de Cochabamba a el Chapare, y claro jugó por esa región y nada tuvieron que ver los futbolistas que son contratados para defender una camiseta que de repente fue cambiado a color azul del masismo y esa ya fue una mala impresión que el club sería utilizado políticamente para cambiar la imagen del pedófilo Morales ante la mayoría de los bolivianos que lo ven como un mal recuerdo y “cadaver” político y no tiene ninguna chance como para volver al gobierno, ya que el mismos el mismo en su tiempo se descalificó al criticar a los “viejos” candidatos políticos del MNR, ADN y otros.
Ahora se encuentra en esa situación, siendo que los bolivianos lo obvian y se redujo a un pequeño grupo de amistades del MAS que tiene tres jefes, Arce, Morales, Choquehuanca.
El objetivo de tener un club fue justamente fue para lavar la imagen del cocalero y para ello utilizó a las 6 federaciones del trópico cochabambino y comprometió y durante los primeros meses funcionó y tenía un equipo interesante y luego de las derrotas comenzaron a desarmarlo y se quedaron los que tenían por cobrar sus salarios y actualmente deben como 5 meses, ya descendido de la categoría y le falta un partido por jugar para concluir su participación, que no le cifra nada igual esta fuera de la División Profesional.
Pues la planilla mensual de los salarios de los jugadores pasa los 100 mil dólares y si haces cuentas, los cacaleros deben por lo menos medio millón de dólares sin contar cartas y espadas, ya que a eso hay que aumentar el salario del cuerpo técnico.
Pero el destino de los salarios, no se sabe cual será, ya que los dirigentes desaparecieron y como van las cosas los jugadores queden colgados y no cobrar nada, hasta el momento la situación es “negra”.
SPORT BOYS
Hace pocos años atraes corrió la misma suerte el club Sport Boys de Warner que también fue dirigido por políticos para lavar dólares del masismo, el encargado Carlos Romero en esa ocasión ministro de gobierno.
Sport Boys corrió su suerte y siguió casi la misma historia de Palma Flor, terminaron con sueldos en deuda y descendió y en ninguno de los casos les dio resultados a los masistas y claro uno se pregunte de dónde sale el dinero, claro no es muy honesto, porque tener un club de la noche a la mañana es mucho dinero extra, además.
De repente se piensa que los cocaleros y Evo Morales son “pobrecitos” esa es una gran mentira olímpica, pues el cocalero tiene mucho dinero y es un millonario en Bolivia a costilla de los “pobres” que le creen.
NO PAGARON A LOS ÁRBITROS
La dirigencia, además de dejar al equipo descendido de categoría, volvió a incumplir con el pago a los árbitros que dirigieron el duelo ante Bolívar, el pasado sábado en Villa Tunari, según denunció la Asociación Boliviana de Árbitros de Fútbol (ABAF).
Es la segunda vez que sucede este incumplimiento, además que el directorio actual que se hizo cargo del club no responde a ningún requerimiento de manera irresponsable.
El titular de ABAF, Víctor Hugo Chambi, además de todos los colegiados del país, denunció que efectivamente los dirigentes cocaleros no pagaron el arbitraje nuevamente.
En aplicación del Reglamento General del Campeonato 2023, cuyo inciso G del artículo 7 «Disposiciones de arbitraje» se establece una multa para el club infractor a ser cobrado por la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) por este incumplimiento.
«El club que oficie de local deberá cancelar pasajes y viáticos para los árbitros, de acuerdo a las tasas fijadas. Los clubes tienen la obligación de cancelar los emolumentos estipulados a los árbitros en el entretiempo del partido. En caso de que un club no cancelara los emolumentos a los árbitros, la FBF se hará cargo de cancelar los mismos, imponiendo una multa del 100% del monto omitido al club infractor», indica el RGC.
Los dirigentes de Palmaflor desaparecieron hace meses. Abandonaron a su club y el no pago a loso árbitros, compromete más allá de la categoría profesional del club, sino su misma existencia.
Resignado el arquero sub-23 de la selección y de Palma Flor dijo al final «Orgulloso de mi equipo que lucho hasta el final a pesar de todo lo que vivimos.
Pedir disculpas a las personas que siempre estuvieron con nosotros en Villa Tunari, las madres de la cocina y trabajadoras del hotel. Cerramos el año deportivo como empezamos…¡SOLOS! Solo Dios sabe por qué hace las cosas… esto recién empieza», dijo en su cuenta en las redes sociales. rc/cm/md/PAN Noticias/La Paz.
