IN EXTENSO.- En diciembre de 2023, una audiencia por el caso de trata y tráfico contra Gabriela Zapata (Cara Conocida), fue suspendida tras una serie de inacciones judiciales y por la inasistencia de Evo Morales, quien figura en el caso como presunta víctima.
De acuerdo a los antecedentes, Gabriela Zapata (ex amante del cocalero) es investigada por presuntamente intentar suplantar a un supuesto hijo de Evo Morales. Este acontecimiento sucedió en 2016 en medio de referendo donde los bolivianos por mayoría decidieron que Evo no puede ser reelecto por tercera vez y pese a eso lo hizo, violando la Constitución Política del Estado (CPE).
Gabriela Zapata, expareja de Evo, se hizo conocer de manera pública cuando salió a la luz un certificado de nacimiento de un supuesto hijo que presuntamente tuvo con Morales.
Dentro de otro caso, Zapata fue sentencia a 10 años de cárcel por los delitos de legitimación de ganancias ilícitas, contribuciones y ventajas ilegítimas, asociación delictiva, falsedad material y uso de instrumento falsificado; tras haber usado las oficinas de la Unidad de Gestión Social de la Presidencia para reuniones personales. Sin embargo, en 2021, fue liberada.
TRATA DE PERSONAS
El Tribunal de Sentencia Cuarto del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, este 2024 emitió dos mandamientos de comparendo para el expresidente y ex vicepresidente Álvaro García Linera, para que presten sus declaraciones en el proceso contra Gabriela Zapata por el presunto delito de trata de personas, relacionado a la suplantación de “un inexistente hijo” del exmandatario.
Evo Morales y Álvaro García Linera deberán presentarse en juzgados paceños el martes 30 de enero a las 14:00 horas, en el Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, en el edificio Anexo A, calle Genaro Sanjinés, piso 2.
De no presentarse, se emitirá un mandamiento de aprehensión y con la advertencia de remitirse los antecedentes al Ministerio Público.
“Cara Conocida” y otras personas están acusadas de suplantar a un niño para hacerlo pasar como si fuera el hijo de Evo Morales. El caso data del año 2016 y se convirtió en un escándalo para el Gobierno nacional.
El expresidente fraude Evo Morales y el exvicepresidente “millonario” Álvaro García Linera, fueron citados por la Justicia para presentarse el martes 30 de enero en el juzgado de la ciudad de La Paz para prestar su declaración informativa por el caso trata de personas que es investigado contra Gabriela Zapata, expareja sentimental de Morales.
Mediante un mandamiento de comparendo, la jueza del Tribunal de Sentencia Penal de La Paz, Inés Tola Fernández, emitió las citaciones para las dos exautoridades de Gobierno en calidad de “testigos ofrecidos por la acusación particular”.
El documento advierte que, en caso de inasistencia, se emitirá una orden de aprehensión contra Morales y García, “en mérito al artículo 198 del Código de Procedimiento Penal”.
NOS REMONTAMOS AL 2016
La DW publicaba a nivel internacional el 12 de junio de 2016, anunciando que la Policía de Bolivia detuvo a los padres del niño presentado en abril pasado ante la Justicia para hacer creer que era hijo del presidente Evo Morales y su expareja Gabriela Zapata (en la foto).
Así lo había informado ese día, el Fiscal General, Ramiro Guerrero. La autoridad dijo en una rueda de prensa que los padres y otros familiares, supuestos cómplices de la suplantación, cinco personas en total, están detenidas desde anoche en La Paz y serán imputadas por los delitos de trata de personas, asociación delictiva y obstrucción de la Justicia.
Gabriela Zapata presentó al menor durante el juicio que le inició el gobernante para forzarle a mostrar al supuesto hijo de ambos, debido a que ella aseguraba que estaba con vida, mientras que el presidente sostenía que había muerto tras nacer en 2007.
Guerrero sostuvo que la investigación estableció que los abogados de Zapata ofrecieron a los papás del menor entre 5.000 y 15.000 dólares, además de pagar toda su educación hasta el bachillerato y darles un terreno a cambio de que se lo use en la suplantación.
«Lamentablemente, los papás del niño se prestaron a esta situación y su mamá era quien le enseñaba y le indicaba lo que debía decir sobre quién era su padre y su madre y quién era la supuesta hermanita. Todo fue una asociación delictuosa», sostuvo Guerrero.
Agregó que el niño con el que se intentó el engaño, que tiene cinco años, dijo a los fiscales con qué abogados se reunían sus papás para planificar el fraude y entre ellos supuestamente estaba el jurista Eduardo León, también detenido desde hace varias semanas.
Guerrero sostuvo además que dos periodistas del canal internacional CNN fueron grabados a principios de mayo entrando a un hotel de La Paz con el niño y sus familiares con la supuesta intención de entrevistarlo.
UN CASO CON TINTES DE TELENOVELA
El fiscal dijo que no tiene constancia de que se hizo tal entrevista, pero el niño relató a los fiscales que le pusieron «un antifaz» para hacer declaraciones y en el lugar había personas con «capuchas».
«Seguramente, en algún momento, si estos todavía se encuentran en el país, los convocaremos a estos dos periodistas de CNN para conocer la verdad de los hechos», sostuvo Guerrero.
El padre del menor es hijo de Pilar Guzmán, una tía de Zapata, que inicialmente ayudó a defender la versión de la existencia del supuesto hijo del presidente Morales, pero luego se desdijo y está detenida desde mediados de mayo pasado.
Zapata, también recluida desde febrero al estar acusada de delitos económicos, aceptó esta semana declarar por primera vez ante los fiscales y se retractó de su afirmación inicial de que el hijo que tuvo con el mandatario en 2007 estaba con vida.
Según los medios, Zapata aseguró en esa declaración reservada que, en realidad, el niño falleció el 2 de octubre en 2009 en La Paz. El caso, con tintes de telenovela, comenzó en febrero cuando un periodista denunció un posible caso de tráfico de influencias, ya que Zapata, tras la relación con Morales, fue gerente en Bolivia de una empresa china que firmó millonarios contratos con el Estado. El caso estalló poco antes del referendo del pasado 21 de febrero, en el que los bolivianos votaron contra una modificación de la Constitución para permitir una nueva candidatura de Morales en 2019.
Morales achacó al escándalo la derrota que sufrió en el referendo 2016 y sus seguidores plantean que la consulta se repita ya que, según argumentan, la población votó engañada por las mentiras de Zapata. León, que era uno de los principales defensores de la mujer, ahora ha cambiado de opinión, la ha calificado de «psicópata» y ha sostenido que ella necesita una valoración psiquiátrica porque un 90 por ciento de lo que afirmaba resultó mentira. LA PAZ/POLITICA/PAN Noticias/Word Press. (Del libro inédito CARA CONOCIDA) f:rr.ss.