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In extenso (panbolivia.com) abril 2 de 2020, La Paz-Bolivia.- Los financieros y economistas coinciden en que existe una especulación financiera detrás de los avances científicos e insumos para combatir al Coronavirus, provocado por la pandemia en una oportunidad de lucro de miles de millones de dólares para la industria farmacéutica y otras industrias, dejando colgados y con serios problemas a los gobiernos.
Dicha afirmación desnuda la realidad actual que atraviesan más de 160 países en el mundo con el contagio de la Coronavirus y así refleja el libro de Steven y Hilary Rose “Genes, Células y Cerebros” (ediciones IPS) sobre una pregunta de ¿Quién se beneficia con esta crisis sanitaria mundial?
El avance de esta pandemia ha generado que los gobernantes hayan decretado aislamientos obligatorios de sus ciudadanos en una cuarentena masiva, nunca vista en la historia de la humanidad, además de estados de sitio secantes, contrariamente con deficientes medidas que revelen masivamente a los posibles portadores del virus mediante el testeo (como le llaman los médicos) masivo de casos sospechosos COVID-19.
MEA CULPA
Como en la historia de todas las epidemias, la búsqueda del culpable ha llevado a la identificación de un enemigo interno, el ciudadano.
Pues ahora resulta que los enemigos terminan siendo los mismos ciudadanos en cada región como ya ocurrió en anteriores enfermedades, terminamos concluyendo que no es el virus el enemigo, sino el ciudadano “imprudente” que esta fuera de su casa en busca de un alimento para su familia a riesgo de contagiarse con el “maldito” virus chino.
Esta claro, que las medidas impuestas en Bolivia, América y todo el mundo afecta a los sectores más frágiles de la sociedad, como el informal en el país, el mundo, y que ha crecido en los últimos años, debido a la falta de trabajo, quedando desempleados, madres solteras y otros que no tienen seguro médico, aunque tenerlo es algo inseguro.
Estos sectores solo cumplen las restricciones gubernamentales mediante la fuerza policial o militar que se encargan de arrestar a los indisciplinados, las razones se las pueden entender, ya que es una cuestión de dinero, pero esta el otro lado, ¿qué pasará si se contagian? será un mayor problema para el estado boliviano que tiene encima precarios hospitales producto de la negligencia y dejadez del gobierno de Evo Morales.
LOS NUEVOS RICOS
La industria farmacéutica entre otros, no verá afectada sus intereses económicos, pues el precio de los medicamentos aumentó durante la dura pandemia expandida por los chinos y está dicho que sus laboratorios no estarán ni por asomo puestos al beneficio de las mayorías de los países.
Muchas industrias farmacéuticas, ya subieron precios sin ninguna explicación y menos control alguno, pues al parecer son libre estos consorcios internacionales que penetran a los distintos países para la venta de sus productos farmacéuticos.
En Bolivia son cuatro las redes que se encargan de comercializar los fármacos y tampoco tienen control en sus precios al cliente y se colocan nombres muy sugestivos como: Farmacorp, Farmacias Bolivia, Chávez, Mifarma que crean un “monopolio” y dejan a otras farmacias pequeñas en desventaja en los precios. Hace poco varios vecinos ya denunciaron la subida de precios de los fármacos en esas redes de farmacias.
Similar situación sucederá con la medicina privada, siendo que los costos de la consulta o atención médica subirá de precio a los pacientes. Lo que implica y como ocurrió con el Sistema Único de Salud (SUS) en una medida política demagógica, colapso el sistema público de salud.
Retomando la pregunta inicial podríamos afirmar que los beneficiarios serán las industrias farmacéuticas, medicina privada, las fuerzas represivas y las comercializadoras de fármacos monopólicas en primera instancia, que ya invadieron el mercado boliviano y “todo legal”.
HAY MÁS
También empresas que manejan servicios de comunicación para que no salgas de casa como Viva, Tigo, Entela Axs en el país, Netflix, compras en online, comida a domicilio, que algunos empresarios ya pusieron el ojo en este comercio. Además de compañías que se dedican a la fabricación de vacunas, productos desinfectantes y barbijos, empresas biotecnológicas que efectúan ensayos clínicos para desarrollar una vacuna específica contra el Coronavirus y quien saque primero el producto se hará millonario en cuestión de minutos. Se trata de empresa norteamericanas, chinas, inglesas y otras que van contra el tiempo y contra el virus, pero con el viento a favor de hacerse ricos por el consumo masivo de la supuesta vacuna que puedan encontrar.
Mientras los países con menos tecnología científica están sometidos a la simple compra y casi condicionados a hacerlo, caso contrario significaría el acabose de un gobierno.
Es solo una parte, porque hay otras empresas que se están beneficiado indirectamente por la expansión del virus, como servicios de teleconferencias, educación online, entretenimiento, debido a que algunos países cerraron las escuelas y trabajan mediante con el uso del internet, aunque el grupo es muy reducido, algunos colegios nacionales lo hacen, también hay empleados que trabajan desde sus casas.
Bolivia no es la única, pues en distintas partes del mundo la gente está optando por evitar los lugares públicos o masivos, ya que los casos aumentan de manera considerable, estamos cerca de un millón a nivel mundial y de muertos más de 50.000, según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿REALMENTE ES MORTAL EL NUEVO CORONAVIRUS?
Más de 160 países en el mundo han destinado miles de dólares para adquirir insumos, fármacos, personal médico, apoyo, transporte, alimentos, bonos como en Bolivia y que en cierta no conformará a nadie, ya siempre existe un argumento como para aprovecharse de la situación, Lo que implica que los gobiernos son permeables y vulnerables para enfrentar de algo que ni siquiera crearon ellos como el Coronavirus, que en el futuro afectará a la economía de los diferentes países en menor o mayor proporcionalidad.
A medida que la pandemia del virus se expande por el mundo, más mercados optan por restringir sus actividades, intentando frenar el avance de la enfermedad, pero no será posible si los ciudadanos no actúan de manera honesta. rc/mdc/kd