In Extenso (PAN BOLIVIA) La Paz.- Las alcaldías de la ciudad de El Alto, La Paz y un sector de la Policía Boliviana, intensifican batidas contra el consumo de bebidas alcohólicas en las calles de la ciudad y la requisa de bebidas adulteradas en locales públicos y evitan que menores de edad estén expuestos al consumo.
De esta manera las autoridades pretenden disminuir la inseguridad en los locales y las mismas calles, que de a poco se convierten en cantinas, aún peor en los escenarios deportivos, donde los fines semana los ciudadanos acuden bajo el pretexto de hacer deporte y terminan bebiendo en equipo.
ESCENARIOS DEPORTIVOS
Estos complejos como el de la Said, kilómetro 7, canchas de San Antonio, Achachicala, complejo cervecero en Miraflores y otros de barrios de la ciudad de La Paz, los fines se activan la venta de bebidas alcohólicas, donde manera inescrupulosa se expende cerveza como si fuese refresco a vista y paciencia de los administradores, concesionarios de restaurantes, kioscos, son quienes supuestamente tienen “caña libre” para vulnerar las ley que prohíbe la venta de alcohol.
Hace poco denunciamos sobre el Complejo Fabril de la ciudad de El Alto, que virtualmente los fines de semana es un verdadero bar y entre las semana, son los universitarios de la Upea quienes adquieren bebidas en el escenario de los fabriles.
Mientras que algunas calles de ambas ciudades, los fines de semanas cierran las calles, sin más y más, bien para prestes, ensayos, aniversario del barrio del club u otros y en medio altoparlantes musicales circulan los “tragos” sin control alguno y en los costados se apostan, los comerciantes de cerveza, quienes circulan sus puestos en este tipo de acontecimientos, estando muy pendientes de la fiestas de los barrios para vender cerveza especialmente.
ADULTERADOS
A eso hay que sumar los locales legalmente establecidos en la ciudad, como restaurantes que funcionan en el día y en la noche se transforman en cantinas, discotecas y pub que efectivamente tienen autorizaciones, pero que estos locales venden “tragos” adulterados y por lo general es el alcohol (metano) que disfrazan en las bebidas como el ron, singani, whisky a un pero los mix o combos que los jóvenes toman por el precio bajo de esos productos, donde el control de salubridad no existe.
REQUISAS
Hace poco, la Intendencia realizó una batida, logrando efectuar 163 intervenciones a actividades económicas y decomisó 700 bebidas alcohólicas, principalmente en la entrada folklórica de Chasquipampa y en el Entierro del Pepino, en Max Paredes.
La Paz como ninguna otra ciudad, tiene una serie de festividades en los barrios, de grupos, fraternidades del Gran Poder y otros acontecimientos que por lo general son festejados en las vías públicas. Personas que se exponen a asaltos, robos entre algunos casos, contrariamente el municipio intenta regular esta situación, ya que estos eventos provocan inseguridad que difícilmente pueden ser controlados por la policía y el municipio.
En estas batidas la Policía procedió a la remisión de tres personas de sexo masculino a instancias pertinentes por posesión de sustancias controladas.
MENORES EN RIESGO
Mientras que el personal de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, durante la batida, adoptó medidas preventivas ante la presencia de gran número de menores de edad que acompañaban a sus progenitores que expendían o consumían bebidas alcohólicas en las festividades.
En la oportunidad y manera preventiva, se impidieron el armado de tarimas no autorizadas en la zona de Chasquipampa y el ingreso de camiones en los que se pretendía distribuir cerveza en el sector. (kd)