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Inextenso (panbolivia.com) 16 febrero de 2021, La Paz.- Las ciudades bolivianas por primera vez en la historia pasaron una carnaval entre restricciones y cuarentenas en las distintas regiones, ccon el objetivo de frenar los contagios y reducir los rebrotes ante el descuido de los habitantes de las ciudades como del campo.
Excepto algunos desubicados tanto en el campo como en la ciudad, festejaron en grupos, sin barbijos y desinfectantes, lo que en cierta forma podría provocar una otra ola en las siguientes semanas, desafiando al virus chino, mientras que la policía no fue dislocada por el gobierno masista para mejorar esta situación y simplemente los municipios con su personal se dedicaron a esa labor y el gobierno miró de palco y fuera de no ser una ayuda tampoco colabora a los bolivianos.
Entretanto este martes de ch’alla se realizó entre medidas de bioseguridad y el pedido de salud para la familia, aunque algunos no cumplieron.
En la ciudad de Cochabamba, los ciudadanos acudieron muy temprano a los mercados para comprar las ofrendas.
En La Paz, las calles estaban vacías, el ritual se realizó en hogares y con medidas de bioseguridad. Las calles de la ciudad estaban vacías. La tradicional cha’lla se realizó al interior de los domicilios, a puertas cerradas y con petardos y fue más familiar con bebidas.
Pese a todo, la pandemia no frenó la costumbre que a diferencia de otros años se realizó aplicando medidas de bioseguridad para tratar disminuir los contagios y la vacunas no son las solución hasta el momento y sigue en que llegan y llegan.
En la ciudad de El Alto la gente se fue a los abastos para adquirir racimos de globos, serpentina y mixtura y adornar sus domicilios.
Como parte de la ofrenda quemaron una ‘mesa’ y rocíaron alcohol, vino o cerveza como una muestra de agradecimiento a la Pachamama por todo lo recibido. (rc/md)