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La comuna paceña concluyó la refacción del alcantarillado pluvial y la conducción de aguas en el Mercado de las Flores que se encuentra en la avenida Baptista, frente al Cementerio General, aunque las floristas no tienen cuidado con esta infraestructura, ya que botan deshechos de manera indiscriminada y menos cuidar la infraestructura.
Los 53 comerciantes de este mercado y la Junta de Vecinos de Callampaya aportaron recursos económicos para la compra de materiales, como tubos, cemento y áridos.
Luego de Todos Santos continuará la ejecución de un nuevo piso que tiene materia prima adquirida. Se prevé concluir antes de la Fiesta de las Ñatitas.
Para esta segunda obra, la junta de vecinos está poniendo el cemento y la arena, unos ocho mil bolivianos. En un 100 por ciento, todo el piso será arreglado con un nuevo encarpetado de cemento, son alrededor de 300 metros cuadrados.
CEMENTERIO
Al margen de estas obras se encaran otras obras dentro el cementerio y un control estricto de personas que ingresan al Campo Santo, muy a propósito de la fiesta de Todos los Santos, donde está prohibido el ingreso de comida o masas al interior del recinto, paralelo a que las personas deberán portar material de bioseguridad.
Aunque los trabajos de albañilería bajaron en sus labores, debido a que muy poca gente asiste al cementerio y se prevé que para el fin de semana subirá la presencia de los dolientes y ciudadanos que normalmente visitan el cementerio tradicional de la ciudad de La Paz. rc/kd (panbolivia.com).