IN EXTENSO.- Una audiencia de medidas cautelares se instaló pasadas las 14:00 de este jueves en el piso 6 del Palacio de Justicia de la capital cruceña y la justicia concedió la detención preventiva de tres meses en la cárcel de Palmasola hasta que se realice la investigaciones necesarias. Aunque el gobierno mediante la Asfi es también responsable, ya que en su momento esta entidad estatal dijo que no había problemas en la entidad bancaria y dejó que siga el mal manejo del banco. La detención se realizó en una audiencia maratonica que duró 6 horas.
La Asfi mediante sus ejecutivos intentaron justificar la negligencia de sus funcionarios que deberían ser despedidos, ya que tenían conocimiento del hecho e hicieron «dormir» el tema y ahora las consecuencias será en contra de los ahorristas, empleados en más de 4.500 que están en la incertidumbre.
La intervención tardía de la Asfi, ha provocado este tipo de consecuencia que pone en la inseguridad económica al país, toda vez que el gobierno intenta tapar la crisis económica a la cual ingresará a Bolivia, según los expertos y razón por la que metió las manos incluso en el dinero de los jubilados.
Se trata de cuatro ejecutivos del exbanco Fassil enfrentan audiencia ante juez cautelar por presuntos delitos financieros en Santa Cruz, tras haber sido denunciados y aprehendidos.
La jueza Marianela Salazar fue la encargada el destino de los acusados en el caso en cuestión. El Ministerio Público, representado por los fiscales Carmen Guzmán y Julio César Porras, solicitó que los procesados sean encarcelados de manera preventiva durante 180 días en el penal de Palmasola y sólo fue por 90 días.
Tras la decisión final, los cuatro ejecutivos, incluido otros fueron dirigidos a la cárcel cruceña, según trascendio en el recinto en base a las pruebas y testimonios presentados antes de tomar una determinación.
Mientras los altos ejecutivos de la entidad financiera, Juan Ricardo M.O., Hernán S.V., Jorge Arturo C.V. y Hermes Hugo S.C., se acogieron a su derecho de guardar silencio durante su declaración informativa ante el Fiscalía, pero de igual manera fueron al penal.
4.500 TRABAJADORES EN LA INCERTIDUMBRE
Son más de 4.500 empleados del Banco Fassil, se encuentran en la incertidumbre, el mayor número corresponde a las oficinas en Santa Cruz, y el resto en el interior del país y entre los más importantes 1.500 funcionarios de esta entidad financiera de La Paz y El Alto que quedarón desempleados.
Mientras los funcionarios de La Paz y El Alto se unieron para enviar un acta al Ministerio de Trabajo para pedir que se hagan respetar sus beneficios sociales por los años trabajados.
Los trabajadores desde la intervención asisten a puertas del banco para firmar libros de asistencia para que no califiquen como abandono laboral y pierdan sus beneficios sociales que deben ser reconocido por los interventores y que al parecer será último que piensan en hacer.
Los funcionarios recibieron memorándum de despido en puertas de dicha entidad, tras todas las determinaciones acontecidas, acudieron a puertas del Ministerio de Trabajo para protestar y solicitar una respuesta y como siempre desaparecieron los funcionarios del gobierno. rc/bs/md