IN EXTENSO.- Los bolivianos dijeron «No» en el referendo de febrero de 2016 a permitir que el presidente Evo Morales se presente un cuarto mandado y que pese a eso fue en dirección de hacer FRAUDE junto al vicepresidente Álvaro García Linera para seguir perpetuándose en el cargo junto a sus operadores.
En esa fecha se tuvo dos tensas jornadas de recuento, ante el igualado resultado que mañosamente pretendía el gobierno de Evo Morales, cuando la diferencia era abismal del NO y que bajaron los votos a favor del SI que a toda costa quería el «dictador». Según el recuento oficial del Tribunal Supremo Electoral (TSE), finalmente el «No» se impuso en el referendo celebrado ese domingo 21 de febrero de 2016, cuando la mayoría de los bolivianos, dijo que no podía ir a a las reelecciones las veces que se le ocurriera, el propósito era ese
Con el conteo rápido y al 99,7% de los votos escrutados el «No» obtenía el 51,3% frente al 48,7% que lograba el «Sí», aunque era un dato que no convenció a los bolivianos, ya que ante la abismal votación por el NO lo operadores del TSE ante la orden del gobierno intentó empatarlo, pero no pudo, ya que los medios privados ya tenían el resultado en manos e intentaron disimular la derrota de Morales que hizo gastar dinero de millones de dólares parea hacer el referendo, cuando todo estaba escrito en la Constitución Política del Estado (CPE) e incluso ese dinero debería ser cobrado al mencionado, ya que fue personal la consulta y de algunos de sus operadores. Una de ellas era la presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Katia Uriona, quien ese momento señaló que el organismo electoral esperaría a que finalice el recuento para proclamar el ganador.
EN BOCA DE URNA
Las encuestas a boca de urna que se difundieron el mismo domingo (21F) al cerrar los centros de votación ya daban la victoria al «No» por un ajustado margen, que fue manipulado por el TSE o el gobierno del MAS. Mientras los incidentes continuaban, pero ante la demora en el recuento surgieron denuncias de corrupción e irregularidades en las urnas por los ciudadanos civiles entre ellos los famosos «pititas», plataformas, grupos, vecinos y millones de bolivianos que fueron testigos del hecho al igual que en la renuncia voluntaria de Evo Morales luego el 2019 y el FRAUDE montado que ahora pretende que sea golpe, pero el golpe de cabeza de Morales, dicen los entendidos.
Mientras la Organización de Estados Americanos (OEA), que envió una misión de observación electoral, había pedido a los representantes del gobierno aceptar el resultado final
Morales, presidente mestizo (Y no como pretenden engañar que es indígena, ya que no sabe hablar ni quechua, aymara y menos Guaraní), había dicho que esperaría con «serenidad» y aceptaría los resultados oficiales.
Aunque por adelantado ya sabía que había perdido, ya que los del TSE le informaron e incluso de la igualdad que hicieron para que la diferencia no sea mayor, convertido en un referendo personal, con dinero del estado y los bolivianos, dinero que debería devolver el MAS y Evo Morales.
Dos días después del referendo, cuando ya se hablaba de la derrota del mandatario, que señaló: «Si ganamos será por pocos votitos, si perdemos será por pocos votitos» lo que revelaba que ya tenía conocimiento de la consulta personal. Ya había perdido el apoyo de la mayoría de los bolivianos, ya que se estaba desenvolviendo en medio de una corrupción galopante.
Más de 6,5 millones de bolivianos estaban habilitados para votar en el referendo, en el que hubo una participación del 84,47%. Se consultó a los bolivianos si estaban de acuerdo con modificar su Constitución para que Morales se postulara de nuevo en los comicios presidenciales de 2019 y que pese a la derrota de esta consulta, mañudamente buscó con sus operadores como García de tratar de hallar otras formas de seguir en el poder como el «Derecho Humano» que fue el engaño jurídico y el 2019 nuevamente fue a la reelección, cuando el pueblo le dijo NO y optó por el FRAUDE.
Efectivamente más de 6,5 millones de bolivianos, de los casi 11,5 millones de habitantes que tenía el país a esas fechas, estaban habilitados para votar en el referendo, en el que hubo una participación del 84,47%, sin embargo ya se advertía de estos números estaban sobregirados por el Instituto Nacional de Estadísticas, ya que de repente aparecieron más votantes que nunca, y algún medio los reflejo en su momento, pero pasó a segundo plano y no le dieron importancia.
Ante un aburrimiento de candidatos y no saber por quien votar, un sector de los bolivianos votó por Morales cuando empezó a candidatear en enero de 2006-20116 y asumir el cargo y hace un mes cumplió una década en el poder con su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS). Y hay que reconocer que no fue porque era un gran candidato o méritos sino porque Bolivia no tenía otra opción y probó con los masistas y el resultado esta a la vista, porque esa vez se equivocó la mayoría.
Era evidente que contaba con el apoyo de los rurales del país, aunque no todos, pero también la población del campo es pequeña en relación a las grandes ciudades, donde se concentra la la clase media que mantiene el estado. Morales pretendía volver a participar en los comicios y lo hizo para prorrogar su estadía en la presidencia hasta 2025. Pero la Constitución de Bolivia permite solo dos mandatos consecutivos. Morales llevaba en el cargo desde 2006 y ya había cumplido con los mandatos y mañudamente buscaba seguir en el poder, anunciando que necesitaba un nuevo mandato para completar su modelo económico y social para el país, como en la dictaduras y como ejemplo están Venezuela y Nicaragua.
Pero los casos de corrupción que se hicieron públicos afectaron a miembros de su gobierno, incluso un amorío con una supuestas empresaria (amante de Evo Morales de apellido Zapata) que tuvo que reconocer públicamente recientemente, le pueden haber pasado factura, sin embargo a este 2023 son las personas más ricas de Bolivia (tienen en millones de euros en el banco del Vaticano como Evo Morales, Álvaro García y Gabriela Zapata y que mensualmente cobran sus intereses de un dinero que no es suyo).
Los casos de corrupción involucraron a exministros, parlamentarios y dirigentes del partido de Evo Morales, ya que hasta el momento la Fiscalía no investiga.
La Constitución de Bolivia permite solo dos mandatos consecutivos, sin embargo, a un fallo ilegal, montado del Tribunal Constitucional del Estado, vulneró también la CPE (esos miembros que aprobaron luego tendría cargos en el gobierno e incluso dinero) le permitió volver a presentarse en 2014 al considerar que su primer mandato no contaba puesto que el país fue cambiado de República a Estado en 2009, cuando Bolivia solo tiene una fundación histórica.
El resultado del referendo también impidió que el vicepresidente Álvaro García, con quien ha dirigido el país esos años, vuelva a presentarse en los comicios de 2019, pero de igual manera fue, y al parecer es quien operó el engaño a la mayoría de los bolivianos junto a otros y ahí jugaron un gran papel los «Pititas» y una sociedad civil digna de destacar que de manera patriótica defendieron la democracia al evitar que siga la dictadura y que los masistas sigan haciendo lo que querían y años después empeoró el gobierno con Luis Arce Catacora se profundizó las mentiras la mediocridad de los ministros y viceministros, mejoraron el terrorismo e intimidación a los bolivianos, encarcelamiento, juicios políticos, persecución a políticos por cualquier hecho o hablen y el régimen sigue en contra los bolivianos, afirman los analistas y que la economía esta a poco menos de ingresar a un receso inflacionario como ocurre en el mundo. rc/bs/md/pocaspulgas/
