In extenso (panbolivia.com) La Paz, 20 de febrero.- Sin bien los paceños viven en altura y todo hace pensar que los ríos escurren el agua por sus pendientes, pero lo que más afecta son las riadas que llegan por las lluvias de Norte a Sur o quizás del Este al Oeste y que se presentan en cualquier momento, además de las filtraciones subterráneas que aparecen en la tierra.
El temor de los paceños es que los ríos, Choqueyapu, Orkojahuira, Irpavi, Achumani, Jilusaya, Huayñajahuira, son los que provocan este tipo de situación, ya que las características de alta montaña de sus cerros, con pendientes pronunciadas generan una caída libre del agua en tiempo de lluvias, que descienden a una velocidad inusual con lodo, basura, agua contaminada, llantas, material de construcción, arrastrando por delante lo que encuentra, sean casas, personas vehículos y lo que encuentren a su paso.
Sin embargo, las lluvias en esta región son por sectores, pues en el Norte de la ciudad, cordillera puede estar lloviendo de manera intensa y en el sur haciendo sol y de repente aparecer la riada y no existe tiempo para alertar a la gente en las avenidas cercas de los ríos, viviendas, peatones…solo se escucha el ruido y corren su suerte.
Los grandes ríos y otros subterráneos como las filtraciones han alertado a los ciudadanos, autoridades municipales y es la temporada de estar pendiente en los barrios de La Paz, especialmente en la zona central y la región del sur, pese a los embovedados que se hicieron.
Según datos oficiales desde 2010 hasta 2017, la comuna invirtió Bs 376.003.048 en la prevención de emergencias, que incluye la canalización, embovedado y reparaciones de ríos. En el mismo periodo en prevención y emergencias se invirtió Bs 867.710.486, de acuerdo con los datos de la Secretaría de Planificación.
Entre tanto, desde 2002 a 2017 en prevención de riesgos y emergencias, el Gobierno Municipal invirtió Bs 1.695.189.709, incrementándose de manera paulatina.
Se canalizó y embovedó el río Koripujio de la avenida Los Leones con una inversión de más de Bs 500.000; embovedó el río Jancokollo en Cotahuma, que, además, permitió la construcción de la avenida Landaeta con una inversión Bs 11 millones.
Embovedado del río Apumalla, que beneficia a cinco zonas de Max Paredes y costó Bs 48 millones, y de los ríos Wilajahuira y Lakacollo, con una inversión de más de Bs 4 millones.
Entre las obras de reparación se realizó la de la bóveda del río Choqueyapu con un costo de Bs.10 millones.
Estos y otros proyectos de prevención fueron ejecutados de manera planificada para responder al segundo eje del Plan Integral 2040, denominado “La Paz Protegida, Segura y Resiliente”.
Debido a las fuertes lluvias, crecieron los ríos Huayñajahuira y Aruntaya, con ondas pulsantes, lo que generó daños en barandas y el cierre de puentes. (rc/ad)