IN EXTENSO, Por Washington Joao.- Brasil y Argentina, jugaron el peor partido de las clasificatorias al Mundial 2026 en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro y fueron 90 minutos de un mal ejemplo del fútbol, que independiente del triunfo de los “gauchos” con un fútbol pobre. El encuentro se desarrolló con una serie de interrupciones a propósito y desleal. En el tiempo neto de disputó tan solo 36 minutos de los 90 reglamentarios.
Desde el inicio del torneo así lo planteo Argentina que propuso fue un fútbol “cochino” buscando faltas inexistentes, teatralizadas, insultos, futbol sucio, y claro la selección argentina lo festejó sin importar lo que mostraron en el campo de juego que de pronto no fue fútbol, pareció una velada de boxeo campal entre las barras y los jugadores.
Hay que admirar la dirección del árbitro que tuvo que dirigir un partido lleno de mañas, fricciones, si se trata de ganar como sea, Argentina es la perfecta selección y de lejos sin méritos.
Los jugadores argentinos cada 5 minutos pararon en el suelo, para ganar o perder el tiempo, ya es indecoro el fútbol de esa manera, pero también se gana de esa manera y Argentina lo hiso y no es la primera vez. Pero pierden la admiración de los seguidores de esa selección por el antifútbol que imponen en algunos cotejos. rc/md/wj/ panbolivia.net/Río de Janeiro-Brasil.